Ejercicio físico para la hipertensión arterial en ancianos

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La hipertensión es una de las enfermedades silenciosas que afectan a la mayoría de la población mundial, también conocida como “presión arterial alta”. La presión arterial, a su vez, es responsable de empujar la sangre bombeada por el corazón, por las arterias, llevando el suministro necesario a los otros órganos, y cuando la presión es “alta”, el corazón hace más fuerza para bombear la sangre, porque con la edad las arterias se vuelven menos complacientes y ofrecen más resistencia a su paso. Esta fuerza puede causar daño a las paredes de las arterias y provocar un derrame cerebral, insuficiencia cardíaca e insuficiencia renal.

Sin embargo, el ejercicio físico es una de las principales formas de prevención y terapia utilizadas para los pacientes hipertensos, ya que reduce la presión arterial (PA) y los factores de riesgo cardiovascular, reduciendo las tasas de morbilidad y mortalidad por esta causa.

¿Qué señala la literatura científica sobre el impacto del ejercicio en este caso?

Así, la revisión sistemática titulada “Efectos del ejercicio en el control de la hipertensión en adultos mayores: revisión sistemática”,

incluyó 12 estudios, que analizaron los efectos del ejercicio aeróbico y de resistencia sobre el perfil antropométrico y las respuestas cardiovasculares de pacientes ancianos con hipertensión arterial sistémica (HAS).

El protocolo de entrenamiento tenía una frecuencia semanal de tres veces y una duración de seis meses. Desarrollado de forma concéntrica y excéntrica para miembros superiores, tronco y miembros inferiores, consta de ocho estaciones, cada una compuesta por tres series completas de diez repeticiones cada una, realizadas en ritmo moderado.

Después de seis meses de entrenamiento, los autores encontraron que el uso de un programa de entrenamiento físico basado en ejercicios aeróbicos asociados con ejercicios de resistencia (circuito con pesas), resultó en reducciones significativas en la presión arterial media (PAM) y la frecuencia cardíaca en reposo (FC), acompañada de una reducción lineal en el porcentaje de grasa corporal (% GC) de ancianos hipertensos.

Práctica clínica

Sobre la base de los resultados de la presente revisión, es posible identificar que el El ejercicio aeróbico es una herramienta eficaz en el tratamiento de la población hipertensa de edad avanzada. El entrenamiento supervisado, y con intensidad moderada, parece generar más beneficios que el entrenamiento de alta intensidad, para tales reducciones de la presión arterial. Y esto también puede permitir que el paciente sea menos dependiente de las drogas.

Referencias

NOGUEIRA, Ingrid Correia; SANTOS, Zélia Maria de Sousa Araújo; MONT’ALVERNE, Daniela Gardano Bucharles; MARTINS, Aline Barbosa Teixeira; MAGALHÃES, Clarissa Bentes de Araujo. Efectos del ejercicio físico sobre el control de la hipertensión en ancianos: una revisión sistemática. Revista Brasileña de Geriatría y Gerontología, , v. 15, [S .L.]n. 3, p. 587-601, conjunto. 2012. FapUNIFESP (SciELO).
http://dx.doi.org/10.1590/s1809-98232012000300019
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